Se revisan en este artículo algunos de los postulados de la Teoría de la Mente que han conseguido focalizar la atención sobre las habilidades humanas para interpretar los estados mentales como procesos más puramente cognitivos que sociales, contrastándolos con las tesis socioculturalespara el estudio de la construcción del conocimiento social interpersonal. Desde este último enfoque se propone, por un lado, utilizar modelos como el de formato, rutina o guión como unidades de análisis para la representación mental del mundo de las intenciones y las realizaciones interpersonales, y por otro, se sostiene que todo proceso de construcción del conocimiento se sitúa en el contexto de una cultura. Ambas condiciones se cumplen en el modelo del pensamiento narrativo de Bruner. Desde este enfoque es posible abordar los fenómenos que se originan en la microcultura de los iguales, como el fenómeno de la violencia, que hay que intentar paliar mediante estrategias educativas que no sean incompatibles con la cultura escolar y sus formatos de actividady discurso. Se propone el concepto de interacción narrativa entre las mentes como un marco tanto para comprender los posibles orígenes y causas del complejo fenómeno de la violencia interpersonalentre escolares, como para proponer estrategias educativas útiles para su prevención.