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La irrupción de la COVID-19 ha provocado una multitud de transformaciones de gran calado, que trascienden el ámbito puramente sanitario, dando lugar a importantes cambios socioeconómicos, entre los que destacan por su extraordinaria importancia la evolución de las formas tradicionales de intervención administrativa o la potenciación y/o aceleración de los avances derivados de la (re)volución digital. Así, en los últimos meses hemos asistido a la puesta en marcha de numerosas iniciativas destinadas a paliar los efectos nocivos de la pandemia mediante el desarrollo de herramientas tecnológicas basadas en el tratamiento de categorías de datos personales especialmente protegidas, como los datos sanitarios, lo que plantea importantes cuestiones desde la perspectiva de la privacidad y los derechos digitales. El objetivo de este estudio es realizar un análisis detallado de algunos elementos esenciales, necesarios para lograr el difícil equilibrio entre la promoción de instrumentos tecnológicos que contribuyan a controlar los efectos de la COVID-19 aumentando los recursos disponibles para las autoridades sanitarias, y la salvaguarda del derecho fundamental a la protección de datos personales. The irruption of COVID-19 has led to a multitude of deep-seated transformations, which go beyond the purely sanitary sphere, leading to major socio-economic changes, among which the evolution of traditional forms of administrative intervention or the empowerment and/or acceleration of the advances derived from the digital (re)volution stand out for their extraordinary importance. Thereby, in recent months we have witnessed the implementation of numerous initiatives aimed to alleviate the harmful effects of the pandemic by developing technological tools based on processing categories of specially protected personal data, such as health data, which raises important questions from the perspective of privacy and digital rights. The aim of this study is to carry out a detailed analysis of some essential elements, necessary to achieve the difficult balance between the promotion of technological instruments that contribute to control the effects of COVID-19 increasing the resources available to health authorities, and safeguarding the fundamental right of personal data protection.