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El compromiso académico es un concepto fundamental para explicar el rendimiento académico en universitarios, especialmente en estudios como el grado de maestro, que forma estudiantes para una profesión altamente vocacional. Asimismo, el actual sistema para formar maestros de educación musical mediante la mención plantea algunas ambivalencias respecto al compromiso de dichos estudiantes. Así, nuestro objetivo es comparar el compromiso académico y algunas variables facilitadoras y obstaculizadoras del mismo, en alumnado de esta mención con alumnado del resto de grados de maestro, con el objetivo de proponer acciones que redunden en un mayor aprovechamiento de estos estudios. Para ello se ha realizado un estudio exploratorio prospectivo de carácter transversal que combina metodología descriptiva y correlacional, con datos obtenidos a partir de distintos cuestionarios. La muestra estuvo formada por 610 alumnos de la UB. Los resultados más significativos que diferencian ambos grupos se encuentran, por una parte, en las variables facilitadoras del compromiso académico (estrategias de afrontamiento, y motivación académica), así como en las variables obstaculizadoras (estrés percibido y malestar psicológico). Con todo ello se plantean acciones para mejorar y complementar el plan de acción tutorial de los maestros de educación musical, y, por consiguiente, mejorar el compromiso académico de estos estudiantes.

La música es un potente activador cerebral que implica a una extensa red de estructura neurales corticales, subcorticales y del oído interno para su procesamiento. Estas estructuras no solo intervienen en la práctica musical, sino que también son específicas de otras funciones como la memoria, la emoción o el razonamiento matemático. Por esta razón, la educación musical puede repercutir positivamente no solo en el aprendizaje de un arte en sí mismo como es la música sino también en el desarrollo de competencias clave como la matemática, la lingüística, la interpersonal, etc. El presente artículo es una revisión bibliográfica de tipo multidisciplinar cuyo objetivo es conocer cómo funciona el cerebro musical y cómo la música puede contribuir al desarrollo competencial tanto artístico-cultural como de otras competencias. A partir de dicha revisión se puede concluir que la música puede usarse como un recurso neuroeducativo eficaz para entrenar el cerebro de forma holística y mejorar la interconexión neuronal, lo cual puede beneficiar la formación integral de las personas, así como su bienestar, tanto personal como social. Aun así, cabe seguir indagando sobre la neuroarquitectura musical y su contribución a las neurociencias para conocer con exactitud cómo aprende el cerebro y la importancia de la música como recurso educativo.