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In recent years, developed countries have seen the rise of discussions concerning "the problem with work today." Since this literature tends to reflect the frustrations of the professional–managerial class (as well as other workers in globalized services industries in the digital age), it is often at a significant distance from the concerns of the organized labor movement and the traditional Left. Much of this literature presents an unacceptable either/or: workers are encouraged either to "lean in," and become better "human capital," or else to develop forms of palliative care for these same neoliberal selves by means of personal projects of self-optimization, recovery, and wellness. In Signs of the Great Refusal, Tedd Siegel challenges the assumptions supporting these highly constrained possibilities, asking instead what it might take to deprivatize and repoliticize work itself under contemporary conditions, in order to make a broad-based politics of refusal potentially viable. Where postwork, antiwork, and degrowth discussions taking place today often describe and promote various "postwork imaginaries" in which the decommodification of labor is only implied, Signs of the Great Refusal is concerned specifically with the "postwork political imaginary." Taking up a question formulated by Peter Fleming, Siegel asks, “Can the impossibility at the heart of contemporary capitalism be politically activated to oppose and escape work-as-we-know-it?”

Aunque hoy la idea del reconocimiento de la diversidad cultural, sobre todo en relación a las poblaciones originarias de América Latina, parezca obvia en su realidad y potencialidad, debemos recordar que durante la transición democrática de los años ochenta se imponía aún la visión de naciones homogéneas. ¿Se ocultaban así las fracturas que subyacen al principio nacional, igualador abstracto y negador concreto de asimetrías de clase, género y etnicidad? Por supuesto, y tales injusticias básicas persistían desde el nacimiento mismo de los Estados, escapando, década tras década, a la atención de izquierdas y derechas, de republicanismos y populismos, infaliblemente convocados por un supuesto «interés nacional» superador de diferencias. Sin embargo, en la actualidad, esa perspectiva es cuestionada por la pluralidad de voces que, desde las comunidades locales y en nombre de identidades nuevas o largo tiempo soterradas, buscan manifestarse, hacerse escuchar por el poder institucional y ganar en autonomía. Este volumen reúne trabajos de distinguidos especialistas que se abocan a examinar esta problemática a través de casos contemporáneos, poniendo de relieve, por ejemplo, los vínculos entre indigeneidad y política, los desafíos de la participación ciudadana y el reconocimiento constitucional de la plurinacionalidad.