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Resumen Introduccion GIDEON es un estudio internacional prospectivo, no intervencionista, que evaluo la seguridad de sorafenib en pacientes con carcinoma hepatocelular (CHC) no resecable en la practica clinica diaria, incluidos pacientes Child-Pugh B. Objetivos Analisis de datos recogidos en Espana sobre seguridad y efectividad de sorafenib y los patrones de tratamiento. Metodos Se recogieron los datos demograficos y de la enfermedad, la dosis inicial usada, los acontecimientos adversos emergentes del tratamiento (AA) y las modificaciones de dosis a lo largo del seguimiento. Se valoraron la supervivencia global y el tiempo hasta la progresion de la enfermedad. La eficacia y la seguridad se analizaron en funcion de la clasificacion Child-Pugh y la dosis inicial. Resultados Se incluyo a 143 pacientes de 19 hospitales espanoles. El 24,5% eran pacientes Child-Pugh B. El 90,9% de los pacientes recibio una dosis inicial de 400 mg/12 h. En pacientes Child-Pugh A se modifico mas frecuentemente la dosis y la duracion del tratamiento fue mas larga. La incidencia de AA y de aquellos relacionados con el farmaco fue similar en los pacientes Child-Pugh A y B, aunque los AA graves fueron mas frecuentes en los pacientes Child-Pugh B. Los mas frecuentes fueron diarrea, fatiga y eritrodisestesia palmo-plantar. La mediana de supervivencia global fue de 384 dias, y superior en pacientes Child-Pugh A (593 vs. 211 dias en Child-Pugh B); la mediana hasta la progresion de la enfermedad fue de 177 dias, similar en ambos subgrupos. Conclusion El perfil de seguridad de sorafenib en pacientes espanoles con CHC no resecable es independiente de la funcion hepatica. El estado Child-Pugh no parece influir en el enfoque de dosificacion de sorafenib ni en el tiempo hasta la progresion, pero si parece ser un fuerte predictor de la supervivencia.

Evaluation of submucosal lesions of the digestive tract with conventional endoscopy is unsatisfactory since this technique does not allow direct observation or correct evaluation of the size and layer of origin of the tumor; therefore, in most patients an etiological diagnosis cannot be established with this procedure. However, in most patients, endoscopic ultrasonography can resolve these problems: to a fair degree of certainty, this technique can differentiate malignant from benign lesions, measure their size, and establish their layer of origin. Endoscopic ultrasonography is the technique of choice to establish the presence and characteristics of submucosal tumors and their suitability for treatment. Moreover, this procedure can identify tumors that can be removed endoscopically without excessive risk. Hydrogastric ultrasonography can be an effective substitute for echoendoscopy when evaluating submucosal lesions and for staging tumors of the gastric antrum when echoendoscopy is not available or in patients in whom it cannot be performed. Hydrogastric ultrasonography is safe, inexpensive and very well tolerated by patients. We present the case of a female patient with a gastric GIST that was evaluated using hydrogastric ultrasonography. The size, layer of origin, and malignancy of the tumor were accurately established.