Alfaro-Alarcón, Alejandro, Hetzel, Udo, Smura, Teemu, Baggio, Francesca, Morales, Juan Alberto, Kipar, Anja, Hepojoki, Jussi, University of Zurich, B. Kibenge, Frederick S, and Hepojoki, Jussi
Reptarenaviruses cause boid inclusion body disease (BIBD), a poten- tially fatal disease, occurring in captive constrictor snakes boas and pythons worldwide. Classical BIBD, characterized by the formation of pathognomonic cyto- plasmic inclusion bodies (IBs), occurs mainly in boas, whereas in pythons, for example, reptarenavirus infection most often manifests as central nervous system signs with limited IB formation. The natural hosts of reptarenaviruses are unknown, although free-ranging/wild constrictor snakes are among the suspects. Here, we report BIBD with reptarenavirus infection in indigenous captive and wild boid snakes in Costa Rica using histology, immunohistology, transmission electron microscopy, and next-generation sequencing (NGS). The snakes studied represented diagnostic post- mortem cases of captive and wild-caught snakes since 1989. The results from NGS on archival paraffin blocks confirm that reptarenaviruses were already present in wild boa constrictors in Costa Rica in the 1980s. Continuous sequences that were de novo assembled from the low-quality RNA obtained from paraffin-embedded tissue allowed the identification of a distinct pair of reptarenavirus S and L segments in all studied animals; in most cases, reference assembly could recover almost complete segments. Sampling of three prospective cases in 2018 allowed an examination of fresh blood or tissues and resulted in the identification of additional reptarenavirus segments and hartmanivirus coinfection. Our results show that BIBD is not only a disease of captive snakes but also occurs in indigenous wild constrictor snakes in Costa Rica, suggesting boa constrictors to play a role in natural reptarenavirus circulation. Los reptarenavirus causan la enfermedad del cuerpo de inclusión de las boas (BIBD), una enfermedad potencialmente mortal que se produce en las serpientes constrictoras cautivas, boas y pitones, de las serpientes constrictoras en cautividad, las boas y las pitones, en todo el mundo. La BIBD clásica, caracterizada por la formación de cuerpos de inclusión cito de inclusión patognomónicos, se da principalmente en las boas, mientras que en las pitones, por ejemplo, la infección por reptarenavirus se manifiesta más a menudo como con una formación limitada de IB. Los huéspedes naturales de los reptarenavirus son desconocidos, aunque las serpientes constrictoras salvajes y en libertad están entre los sospechosos. En este caso, informamos de la existencia de de reptarenavirus en serpientes constrictoras autóctonas y silvestres de Costa Rica. Costa Rica utilizando histología, inmunohistología, microscopía electrónica de transmisión y secuenciación de próxima generación (NGS). Las serpientes estudiadas representaban casos de diagnóstico post de diagnóstico de serpientes cautivas y silvestres desde 1989. Los resultados de la NGS en de parafina de archivo confirman que los reptarenavirus ya estaban presentes en las boas en Costa Rica en la década de 1980. Las secuencias continuas que se ensamblaron de novo a partir del ARN de baja calidad obtenido de los tejidos embebidos en parafina, permitieron identificar un par de segmentos S y L del reptarenavirus en todos los animales estudiados. En la mayoría de los casos, el ensamblaje de referencia pudo recuperar segmentos casi completos. El muestreo de tres casos prospectivos en 2018 permitió un examen de sangre o tejidos y dio lugar a la identificación de segmentos adicionales de reptarenavirus y coinfección por hartmanivirus. Nuestros resultados muestran que la BIBD no es solo una enfermedad de las serpientes cautivas sino que también se da en las serpientes constrictoras silvestres de Costa Rica, lo que sugiere que las boas constrictoras desempeñan un papel en la circulación natural de reptarenavirus. Universidad Nacional, Costa Rica Escuela de Medicina Veterinaria