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La Cardiografía por Impedancia (CI), o monitoreo hemodinámico no invasivo, es un nuevo método de diagnóstico para el control del tratamiento de la: Insuficiencia Cardíaca (1), Hipertensión Arterial Sistémica (2-3), Disnea (4), Optimización del uso del Marcapasos (5) y otras muchas aplicaciones en las diferentes especialidades médicas. La Hipertensión Arterial Sistémica es una enfermedad hemodinámica que a pesar de haber sido estudiada muy intensamente, hasta ahora su control es muy bajo en todo el mundo. Presentamos en este estudio una manera muy práctica de poder alcanzar un control más efectivo de esta patología de alta prevalencia

Un nuevo método de diagnóstico no invasivo, utiliza la Cardiografía por impedancia (CI) para rápidamente obtener una información del estado hemodinámico que permita un mejor control clínico para evaluación, diagnóstico, pronóstico y tratamiento de nuestros pacientes. (1) El método registra el flujo sanguíneo, la resistencia vascular, la contractilidad cardíaca y el estado de los líquidos corporales, completando 17 parámetros o más dependiendo del tipo de equipo que se utilice. La CI nos permite evaluar mejor al paciente para controlar el tratamiento de la: Insuficiencia Cardíaca (2-3), Hipertensión Arterial Sistémica (4), Disnea (5), Optimización del uso de marcapasos (6) y otras muchas aplicaciones en las diferentes especialidades Médicas.

Revisamos el caso de una paciente del sexo femenino de 41 años de edad, procedente y residente en Cuenca, de estado civil casada que recibe tratamiento desde hace 3 años para Hipertensión arterial pero que no se ha podido normalizar sus valores. Hace 24 horas acude a consulta de facultativo por presentar sin causa aparente intensa cefalea occipital acompañada de nausea, mareos, trastornos visuales (fosfenos). En la exploración y examen general se le encuentra con cifras tensionales muy elevadas 170/110 mmHg, por lo que se le administra Captopril Sub lingual de emergencia y se envía para control de especialista. Después de la evaluación clínica, se realiza exámenes complementarios como laboratorio clínico, electrocardiograma y cardiografía por impedancia y se hace la estratificación del riesgo cardiovascular. Se decide tratamiento con terapia combinada con calcioantagonista (CA). Antagonista de los receptores de la Angiotensina ARA II, y un Alfa-beta bloqueador. Los controles a la semana, un mes y dos meses posteriores muestran una paciente controlada y sin la presencia de daños de órgano blanco. Cuatro años más tarde acude a control porque se siente bien, pero quiere una valoración de su estado de salud. Se realizan los exámenes de control, en particular una cardiografía por impedancia y se verifica la normalidad de su estado hemodinámico.