Durante el reinado de Carlos II se produjo la fundación de la Junta de Comercio, con el objetivo fundamental de frenar la inflación que sufría el país. Llevada a cabo la operación de devaluación de la moneda, en 1680, la Junta mantuvo sus competencias. Respecto a la industria textil de la seda, una de las principales reformas hechas fue la elaboración de ordenanzas para la elaboración de tejidos con vigencia a nivel nacional, promulgadas en 1684. Se produjo una actualización técnica total, aumentando mucho la variedad de tejidos, acompañados de condiciones técnicas que facilitaron su implantación. Esta renovación técnica no sólo hizo más competitiva la industria astigitana por la relación entre el coste de producción y el precio final de mercado, sino también desde el punto de vista estético. Se seguían produciendo piezas elaboradas según un marco legal que tenía 141 años de antigüedad, técnicamente obsoletas y estéticamente anacrónicas y, por tanto, muy difíciles de colocar en el mercado, más aun siendo que la industria de Lyon, la principal competidora de la sedería española en el siglo XVIII, había ya comenzado a renovar sus diseños casi cada año. During the reign of Charles II the Board of Trade was established with the ultimate goal of curbing inflation facing the country. After the currency devaluation of 1680, the Board maintained its powers. Regarding the silk textile industry, one of the major reforms made was the development of ordinances for the production of fabrics with nationwide effect from 1684 onwards. There was a complete technical update and great increase of the variety of tissues. Thanks to this technical renovation, industry became more competitive not only because of the relationship between the cost of production and the final market price, but also for aesthetic reasons. Pieces produced in the former legal framework, which was 141 years old, were technology obsolete and aesthetically outdated, and therefore very difficult to sell, especially as Lyon, the main competitor of Spanish silk in the 18th century, had begun to renew designs almost every year.