RESUMEN: En 1772, la publicación de la obra de A. L. Thomas. lissai sur le caractère, les moeurs et l'esprit des femmes dans les différents siècles suscitò la respuesta de una ilustrada francesa. Mme. d'Épinay, a partir de cuya vida y obra podemos percibir el modo en que el siglo XVIII repensó y estableció la diferencia de los sexos. Años más tarde otra ilustrada, en este caso española, Josefa de Amar y Borbón, hizo su propia lectura de Thomas al implicarse en la polémica sobre la admisión de mujeres en la Sociedad Económica de Amigos del País de Madrid. Su defensa práctica de la presencia social femenina en ese ámbito la llevó a producir un discurso sobre la razón de las mujeres. El recorrido por los textos de una y otra muestra los encuentros y desencuentros de dos culturas. En dos contextos sociales y culturales diferentes, produjeron discursos que hemos hecho entrar en diálogo en la medida en que coincidían en la defensa de las mujeres. Ello nos remite a estrategias intelectuales femeninas que desbordan el discurso de los textos morales y normativos al uso, que utilizan todos los recursos culturales a su alcance, todas las fisuras que los textos les permiten, para producir su propia versión de las cosas. Su ejercicio literario las lleva a oponerse o a ignorar a los autores con los que no pueden componer ningún tipo de acuerdo sin apartarse de la estrategia de defender y de ampliar los espacios culturales y de vida en los que se desenvuelven. Su empeño teórico es, a la vez, una estrategia vital que reclama para las mujeres todas aquellas posibilidades y espacios que los hombres exigen para ellos: la escritura y la participación en la gestión de la vida pública. Así, tanto Mme. d'Épinay como Josefa Amar publicaron, valoraron y aceptaron el reconocimiento público y se mezclaron con los hombres en los círculos culturales y las instituciones reformistas. Al mismo tiempo, no obstante, estas historias paralelas nos acercan al modo en que las Luces se vivieron en ambos países. España, una sociedad de fuerte impronta católica, partía de una tradición en la que los sexos vivían más segregados y en la que la sexualidad, el deseo, apenas podían ser pensados fuera del temor con que los textos eclesiásticos los representaban. Quizá por ello, Josefa Amar no se apoyó en sus textos en el discurso elogioso del amor sentimental que, a imitación de la literatura sentible europea, se estaba produciendo en aquellos años en España. Así, mientras Mme. d'Épinay aceptaba las delicias del sentimiento a la vez que rechazaba las trampas de la sentimentalidad literaria, Josefa Amar e Inés Joyes mantuvieron una distancia lúcida llevada por la conciencia del desequilibrio sentimental entre los sexos.ABSTRACT: The publication, in 1772, of Thomas' Essai sur le caractère, les moeurs et l'esprit des femmes dans les différents siècles provoked a response from an enlightened French woman, Mme. d'Épinay, in whose life and work we can discern the way in which the 18th century rethought and repositioned the difference between men and women. Some years later, in Spain, another woman of the Enlightenment, Josefa Amar, involved herself in a dispute about women's participation in a reformist and enlightened institution, the Sociedad Económica de Amigos del País de Madrid. Her pragmatic defence of women's participation in this company led to her producing a speech which is a statement of women's rationality. A perusal of these texts allows us to establish the points of contact of the two cultures. In two different social and cultural contexts, women's sensibility produces positions which we have introduced into the discussion in the degree to which they express a feminine rationality in the defence of women. Thus, an analysis of the texts has brought us to consider feminist intellectual strategies which break through the norms of the prevailing moral argumentation, using all the cultural resources within reach, every weakness of discourse, to subvert them and produce their own version of reality. Their literary efforts led them to oppose or ignore those writers with whom they could not reach some accord without compromising the strategy of defending and enlarging the cultural ambit and the life of women in which they were involved. Their theoretical endeavour was also a vital strategy which claimed for women all those possibilities and spaces which men asserted as their right: writing and participation in public life. Both Mme. d'Épinay and Josefa Amar had works published towards the end of their lives, valued and accepted public recognition, and joined with men to cultural circles and reformist institucions. These parallel histories bring us closer to the way of life of the people of the Enlightenment in different points of Europe. Spain was a society of firmly Catholic stamp which established a cultural tradition of separation between the sexes. The bounds of discourse were restrictive: sexuality and desire could scarcely be thought of except within the terms of fear with which ecclesiastical texts represented them. For this reason, Josefa Amar did not use in her reflections the eulogistic discourse of sentimental love which, in imitation of European literature, was then being produced in Spain. Therefore, while Mme. D'Epinay accepted the delights of feeling rejecting the nuances of literary sentimentality, Josefa Amar and Inés Joyes maintained a clear distance from them, which expressed their consciousness of the disequilibrium of feeling between men and women.