Tesis (M.Sc) -- CATIE, Turrialba (Costa Rica), 2015 Este trabajo presenta un análisis del proceso de revisión, aprobación e implementación del Canon Ambientalmente Ajustado por aprovechamiento de agua (CAA) en Costa Rica, el que se desarrolló en un período de cuatro años, del 2002 al 2006. La metodología utilizada se basa en un método cualitativo, para la recolección y análisis de la información se desarrollaron 7 entrevistas semiestructuradas dirigidas a actores claves, representantes de organizaciones como: Ministerio del Ambiente y Energía (MINAE), Global Water Partnership (GWP), Sistema de Áreas de Conservación (SINAC), Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (FONAFIFO), Asociación Costarricense de Productores de Energía(ACOPE), Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria (CNAA), Cámara de la Industria de Costa Rica, y Conservación Internacional (CI). La información recolecta fue digitalizada en una base de datos y analizada utilizando la metodología de Berdegué et al. 2000, que plantea un análisis de la situación inicial del proceso y su contexto, los procesos de intervención y su contexto y la situación final y su contexto, para finalmente determinar las lecciones aprendidas. Como resultado de este proceso se identificaron cuatro fases importantes: condiciones habilitantes, diseño y presentación de la propuesta, negociación e implementación. De las condiciones habilitantes se resalta: el marco legal robusto, la visión y voluntad política, el grado de sensibilización de los usuarios y los estudios técnicos que respaldaron la propuesta. Se identificó que las condiciones que obstaculizaron el proceso fueron: la poca credibilidad del sector gubernamental, la negativa de los usuarios ante el nuevo canon, deficiente capacidad técnico operativa del ente gubernamental encargado de la aplicación, las restricciones a la aplicación y la ausencia de mecanismos de rendición de cuentas. La propuesta de canon presentada fue obtenida del estudio realizado para la cuenca del río Tárcoles en Costa Rica (IPS 2002), en el que se establece el valor económico del agua para uso agrícola de 0.0054 dólares/m3 (equivalentes a 2.89 colones/m3), después del proceso de negociación se aprobó un CAA diferenciado de 0.0035 dólares/m3 para aguas superficiales y de 0.0046 dólares/m3 para aguas subterráneas. La negociación se reconoce como un proceso político, sustentado en estudios técnicos que soporten la propuesta. Para el planteamiento de un canon se debe tomar en cuenta las condiciones socioeconómicas y ambientales del contexto y de los usuarios, para garantizar su aprobación y aplicabilidad. En este proceso se resalta la capacidad de gestión y de negociación del sector gubernamental. En esta investigación también se realizó un estimado del valor económico del agua que se utiliza en la agricultura para el cultivo de caña de azúcar en la zona del pacífico de Nicaragua. Se realizaron 238 encuestas a productores de caña de 7 departamentos: Chinandega, León, Managua, Masaya, Granada, Carazo y Rivas, con el objetivo de conocer sus características socioeconómicas y las características de la producción de caña de azúcar en la zona, se identificaron las diferencias entre los productores que utilizan riego y los que no, estos últimos conocidos como secano. Se utilizó estadística descriptiva para el análisis de la información socioeconómica y se diseñaron dos modelos econométricos, uno para estimar el valor del agua y el otro para determinar la posibilidad de adoptar riego por parte de los productores. Los modelos fueron corridos en el programa estadístico Stata. Dentro de los principales resultados del análisis socioeconómico tenemos que los productores secano y riego difieren mucho en cuanto a las condiciones como edad, nivel de educación, ingresos económicos y actividad productiva. Los productores de riego presentan un mayor nivel educativo y económico, debido a esto se considera que se ubican en un estrato socioeconómico diferente a los de secano; la característica principal de los productores secano es que son productores natos y viven de lo que producen en su finca. En el análisis econométrico se evidenció que el agua influye de manera positiva en la productividad del cultivo de caña de azúcar, la producción aumenta hasta en 24 ton/mz, maximizando de esta forma los ingresos económicos de los productores. El consumo promedio de agua para el cultivo de caña de azúcar es de 19,249 m3/mz/año riego por gravedad y 11,031 m3/mz/año riego con tecnología (goteo y aspersión). No obstante el riego con tecnología no es significativamente diferente al secano; es decir, son iguales, este resultado se debe a la disminución de los ingresos de los productores con tecnología, por la inversión en riego tecnificado, es importante resaltar que la decisión de invertir en riego es propia de cada productor. El riego por gravedad genera 3,329 córdobas más, por manzana, por año; en comparación con la producción en secano, controlando todos los factores todos que afectan la producción, el resultado más relevante del estudio es que el agua utilizada en el riego del cultivo de caña de azúcar por gravedad genera una riqueza de 0.173 córdobas/m3/año equivalentes a 0.0065 dólares/m3/año. CATIE (Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza)