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Esta investigación aborda el contexto social del trabajo de la obsidiana en El Encinar, ubicado en la región de Tequila, Jalisco, México, durante el periodo Posclásico (900-1525 d.C.). El sitio estaba dedicado a la explotación de obsidiana roja con negro y a la producción de navajas de percusión y de cuchillos bifaciales. Comparaciones formales sugieren que los cuchillos bifaciales eran artefactos con una connotación simbólica, usados en entierros y en centros ceremoniales del interior y exterior de la región, del Epiclásico al final del Posclásico (450-1525 d.C.). La postura teórica que se adoptó se enfoca en la economía doméstica. Particularmente, la investigación de El Encinar se realizó mediante un recorrido de superficie sistemático, una serie de excavaciones estratigráficas, un análisis químico de la obsidiana y un análisis morfológico preliminar del material. Los datos obtenidos se complementaron con información de las fuentes históricas y la bibliografía arqueológica de la región.

Se presenta la primera aproximación al estudio arqueológico de un yacimiento de obsidiana con evidencia de explotación prehispánica: el Cerro El Novillero, ubicado en el municipio de Tala. El yacimiento se encuentra en la región de los Valles Centrales de Jalisco, zona en la que se han identificado numerosos yacimientos explotados en tiempos prehispánicos, y al igual que el resto de los yacimientos regionales, constituye una fuente de aprovisionamiento de materia prima Este estudio busca explicar e interpretar el fenómeno de explotación prehispánica del recientemente identificado yacimiento, analizando la relación existente entre la elaboración de artefactos de obsidiana y el paisaje del yacimiento. En este sentido, se utilizan los conceptos teóricos de tecnología, cadena operatoria y paisaje lítico para analizar los indicadores arqueológicos de la explotación del yacimiento. El planteamiento metodológico para la identificación de los indicadores arqueológicos está comprendido por la prospección (recorridos pedestres y técnicas de detección remota), el análisis lítico de artefactos y los estudios geoquímicos de la materia prima. Mediante esta estrategia teórico-analítica se identificaron áreas de extracción de materia prima en forma de pozos de o trinchera, asociada a grandes acumulaciones de materiales líticos relacionados con la extracción de materia prima y la elaboración de artefactos como núcleos, lascas y navajas. Estos artefactos eran elaborados por percusión directa y los núcleos son mayormente son cónicos o unifaciales, sin preparación de plataforma y con talla unidireccional. Los percutores son de riolita del Cerro El Novillero, pero también se identificaron percutores y hachas pulidas de basalto. Se presenta también la primera aproximación al estudio geológico y caracterización geoquímica del yacimiento, cuya obsidiana presenta diversas calidades y su composición geoquímica es muy homogénea.

Las investigaciones llevadas a cabo en Naachtun, Petén, Guatemala, por el Proyecto Petén-Norte Naachtun (PPNN), se han enfocado en investigar principalmente el Grupos B y las zonas residenciales que rodean el epicentro monumental del sitio. Estos estudios generaron diversidad de materiales (en su mayoría cerámica, lítica y concha), sobre todo relacionados con el último período de ocupación, es decir, finales del Clásico Tardío (fase Ma’ax 3, 750-830 d.C.) y el Clásico Terminal (fase Muuch, 830-950/1000 d.C.). La presencia de las conchas generó el interés por entender de dónde provenía este recurso, si se estaba movilizando la materia prima o los objetos terminados y, en dado caso, cómo se estaban modificando para manufacturar tales objetos. Para ello, esta investigación estudió más de 2,300 elementos de concha encontrados en los basureros, rellenos, sepulturas y depósitos rituales encontrados entre el 2010 y el 2017 por el PPNN y fechados para las fases Ma’ax 3 y Muuch. Se realizó el análisis taxonómico para identificar las especies de conchas y establecer el hábitat de procedencia. Además se hizo la clasificación tipológica para determinar qué especies no estaban siendo modificadas y cuáles sí. Y a una muestra de los objetos se les hizo un estudio tecnológico utilizando microscopía de baja y alta amplificaciones, para determinar la manera en que estos fueron manufacturados.

Los artefactos líticos denominados como “raspadores Coahuilos y Media Luna”, son dos de los utensilios más representativos del sector meridional del desierto chihuahuense. Los primeros reportes que hacen mención estos artefactos se remontan a la década de 1950, cuando se recuperaron por vez primera de las cuevas mortuorias de La Candelaria y La Paila, en Coahuila. Estos artefactos fueron encontrados en perfecto estado de conservación con sus enmangues de madera, lo que ha brindado algunas pistas sobre su función. No obstante, al día de hoy, se desconoce su función específica y en qué actividades fueron usados como instrumentos de trabajo. En esta tesis se analizó una muestra representativa de estos artefactos líticos recuperados en contextos de superficie de varios sitios arqueológicos de la microrregión de Concepción del Oro, Zacatecas. El objetivo fue evaluar el grado de integridad y la correspondencia funcional entre los elementos de diseño artefactual y los rastros de uso dejados por diversas materias trabajadas. Con la finalidad de obtener una mejor comprensión de las actividades realizadas por los grupos cazadores recolectores del norte de Zacatecas. Se aplicaron diversos métodos analíticos: etnoarqueología, arqueología experimental y análisis de huellas de uso, mismos que permitieron acercarnos al conocimiento de las prácticas de consumo que estas sociedades tuvieron en estas regiones áridas. Los resultados obtenidos en esta investigación permitieron discutir en qué tipo de actividades y procesos productivos están relacionados los artefactos líticos.

El marco de interacción que se establece entre el Homo sapiens y otras especies, es uno de los nichos de estudio en los que podemos profundizar a raíz de los restos materiales. La capacidad que tenemos de crear nuestro propio mundo con base en lo que nos rodea, hace que los animales intercedan en ello, situándose los domésticos en un plano de relación privilegiado. Es aquí donde el caso del perro (Canis familiaris) resulta un campo paradigmático de estudio, que ha arrojado considerables resultados dentro de la investigación arqueológica mexicana. Sin embargo, al revisar este fenómeno en la región del Occidente de Mesoamérica, surge la necesidad de realizar una aproximación integradora, que no se limite a la recurrente visión postclasica del perro como animal de paso al más allá. Con la perspectiva teórica que la Zooarqueología Social Interpretativa ofrece, desarrollamos una estrategia de investigación con base en estudios de caso, adscritos a tres subáreas distintas. En las Tierras Altas Orientales se emplaza el sitio de La Mina (Michoacán), concretamente en la orilla sur del Lago de Cuitzeo. Se trata de una plataforma habitacional de finales del Epiclásico, con entierros en su base donde aparecen cachorros junto a humanos. El segundo caso lo constituye el sitio de Los Guachimontones (Jalisco), en el centro de las Tierras Altas Occidentales. Una urbe neurálgica para el Clásico temprano, en la que se documentan cánidos domésticos en diversos contextos hasta el Postclásico. Por último, en las Planicies Costeras estudiamos el sitio de la Loma Funeraria en la Terminal de Gas Natural Licuado Manzanillo y el área residencial y fúnebre de Chocohuistle en el Patio de Maniobras Tepalcates II. Una amplia muestra de perros y humanos compartiendo el mismo espacio, durante un intervalo temporal que va del Formativo terminal al Postclásico. Las bases metodológicas utilizadas para analizar este universo de muestra cuentan con una orientación hermenéutica, en las que prima la obtención de datos inductivos y la colaboración en términos transdisciplinares. Sus fundamentos son el análisis de los restos óseos, la obtención de dataciones numéricas y la estimación de tendencias paleodietéticas, mediante un protocolo arqueométrico de lectura de elementos traza por FRX. De esta forma accedemos al análisis de la relación entre el perro, el humano y viceversa en sus propios términos, con el objetivo principal de reconocer el contexto social en el que se dio esta simbiosis.

La presente tesis analiza un conjunto de fragmentos cerámicos correspondientes a tinajas de gran tamaño recuperadas en el sector de Talleres del sitio Los Guachimontones, que pertenecen al periodo Posclásico. Dicha cerámica está relacionada con unidades habitacionales, pero se desconocía el empleo que se les daba en este espacio, por ello se aplicaron técnicas arqueométricas (química y almidones) para conocer su uso específico y posterior funcionamiento dentro de la organización social. Se toma como punto de partida la idea de que estas tinajas sirvieron para preparar tejuino, dado las comparaciones etnográficas existentes en otras regiones, además de la designación de tejuineras. Los resultados del análisis químico y de almidones indican el uso de las tinajas en la preparación de tejuino, que complementariamente a partir de la comparacíon con ejemplos etnográficos, donde prima el consumo de alcohol, se infiere que la bebida funcionaba como mecanismo para mantener sólidas las relaciones entre los habitantes de dicho espacio. Los indicadores que sugieren esta acción son: estructuras arquitectónicas emplazadas en torno a patios, disposición y uso de unidades habitacionales, presencia de fogones, basureros, ofrendas (líticas y cerámicas).